Cybergerencia: El reto de gerenciar la tecnología

La Cybergerencia conjuga la administración y la transferencia del conocimiento con el uso racional y óptimo de la tecnología, no con la intención de desplazar al hombre por la máquina, sino con el propósito de orientar su desempeño al uso eficiente de la misma, con la finalidad de ahorrar costos e incrementar las ganancias.

Esta herramienta gerencial asume como reto la necesidad de adiestrar, capacitar y desarrollar al individuo en lo que a la tecnología se refiere, no desde el concepto básico del empleo de la máquina para fines puramente operativos, pues de ser así su existencia carecería de sentido. Se refiere a la visualización del empleo de la tecnología como un instrumento estratégico.

Cuando se hizo uso de la reingeniería como herramienta de cambio se infundió en el recurso humano un temor a ser desplazado con la tecnología que luego fue corroborado por muchos a la hora de observar los resultados del cambio y con ello la perdida de sus empleos. Lo anterior no pretende suponer que las organizaciones estaban obligadas a sostener una carga laboral innecesaria una vez reorientado sus procesos y actualizada su tecnología; se refiere precisamente a la falta de vinculación entre el individuo y el ambiente cambiante de la era y la importancia que posee el manejo de la tecnología en el día a día laboral, esto como consecuencia de la ausencia de programas y planes de desarrollo que algunas empresas presentan aún en la actualidad y que no alteran de manera positiva y significativa la cultura tecnológica de la organización.

Todavía la tecnología, en la mayoría de los casos, es subutilizada por las organizaciones que las adquieren, limitando su uso a los procesadores de palabras, presentaciones digitales y, en algunos casos a hojas de cálculo. La presencia del correo electrónico interno, aunque ampliamente difundida, no necesariamente es utilizada por todos los entes involucrados y, el uso de herramientas como Internet apenas si son orientadas a agregar valor a la gestión diaria, no obstante es común observar como quienes poseen estas facilidades técnicas hacen alarde de las mismas aun cuando su utilidad apenas se aprecie.

Aun cuando podría señalarse que sólo las empresas que requieren y están en contacto permanente con la tecnología deberían hacer uso de la misma de una manera más administrativa que otras, tal afirmación serviría para demostrar la carencia de una gestión tecnológica basada en principios propios de la gerencia contemporánea.

La Cybergerencia supone la visión de la tecnología como pieza complementaria del desempeño administrativo y no como un medio lineal y operativo para registrar y almacenar los resultados, pues de lo contrario se estaría traduciendo el concepto primario de las tarjetas perforadas de los otrora computadores al uso electrónico del disco, entendiéndose al computador como la acción que originó su nombre y no como la herramienta en la que se ha convertido.

Algunas empresas todavía gastan grandes sumas de dinero trasladando mensual y hasta quincenalmente a sus gerentes o directores para reuniones cuya finalidad pretende actualizar u ofrecer nuevas directrices, todo ello sin advertir el ahorro que generaría el uso de teleconferencias y trasmisión simultánea de datos. Este es un simple ejemplo del desempeño estratégico del cybergerente, ubicar opciones de inversión tecnológica que se traduzcan en la disminución de aquellos costos que la organización asume como comunes.

La Cybergerencia posee las siguientes características:

  • Considera el uso de la tecnología como complemento del talento humano.
  • Involucra al individuo con el uso consciente de la tecnología para facilitar sus procesos y los de la empresa.
  • Está presente en empresas cuya cultura esta orientada a la innovación.
  • No restringe el uso de la tecnología, lo promueve.
  • Incentiva el pensamiento creativo del capital humano en la búsqueda de mejorar los procesos a través de la tecnología.
  • Promueve la inversión con base en la disminución de costos e incremento de utilidades.
  • Exige el uso colectivo de los dispositivos tecnológicos disponibles en la empresa.
  • Facilita la transferencia de conocimiento.


Asimilar la tecnología no es tarea fácil, en la mayoría de los casos sólo se termina por aceptarla como un requisito, algo que conociendo estrictamente lo básico resulta suficiente para enfrentar un mínimo de retos en las empresas contemporáneas. Hoy se sabe que eso no es suficiente, hay que administrarla, y una herramienta como la Cybergerencia ofrece las alternativas para afrontarla con éxito. Quien no gerencie la tecnología sólo está ante la ilusión del avance tecnológico, sin duda no lo ha alcanzado.